- Es necesario que los perros y gatos vengan correctamente sujetados (collar y correa, transportín bien cerrado, jaula,...) para evitar dificultades en el manejo y enfrentamientos con otras mascotas.
- Mientras esté el perro o gato en la clínica debe permanecer atado o confinado en su transportín o jaula, hasta que te digamos lo contrario. Nunca se soltará a un perro o se dejará salir a un gato en recepción, es peligroso.
- Si es necesario adquirir un transportín para trasladar a una gato a la clínica, aconsejamos que sea de plástico rígido, con el techo desmontable. Son los más seguros, higiénicos y duraderos. También nos permiten un acceso al paciente más cómodo y amable.
- Asegúrate de traer toda la documentación que tengas de tu mascota, incluída la cartilla sanitaria y los datos del propietario.
- Y por último, es importante que la persona que entre en la consulta conozca el estado del paciente, así como sus patologías y tratamientos previos para informarnos durante la visita.